Hoy nuestras chicas entrenaban para el sector de éste fin de semana. Durante toda la tarde había un extraño olor a quemado, no suficiente para preocuparse, pero sí para mosquearse. Avisaron a los conserjes, pero nadie averiguó de donde procedía el olor.
Sobre las 20:25, de pronto, empezarón a escuchar como petardos y cuando la entrenadora se acercó a la conserjería empezaron a explotar los focos (o eso parecía) y se quedó todo a escuras exceptos las miles de chispas que salían del cuadro de luces de la segunda planta, junto al tapiz de entrenamiento.
Sheila dió la voz de alarma y todas las gimnastas abandonaron las instalaciones municipales siguiendo a Aitana y escoltadas por Sheila. Las mayores más conscientes de los que pasaba lloraban, las pequeñas, con cara de susto rompieron a llorar cuando vieron a las madres y empezaron a ver como llegaban la policía y los bomberos.
Esperamos durante una hora y acompañadas por por un bombero las entrenadoras y dos padres entraron para recoger los zapatos y lo que pudieron encontrar, todo lo dejaron dentro y estaban descalzas y sin en ropa de entrenamiento, menos mal que la noche era calurosa!!!!
La nota simpática la pusieron la clase de mantenimiento de Javier, que para evitar lesiones acabaron los estiramientos en los aparcamientos del Pabellón, así se hace!!!!!!!!!!!!!!!
Todo ha quedado en un susto y una anécdota para contar a los compañeros mañana. Muy rápida la intervención del personal del Pabellón y de los equipos de emergencias.
A ver cuando podemos reanudar los entrenamientos!!!!!!! El tapiz está.............. imaginadlo!!!!!!!!!
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